En los tiempos de crisis que corren y ante la dificultad de encontrar un empleo, a muchos se les ha pasado por la cabeza ser sus propios jefes como también aquel que quiere independizarse y no desea trabajar para alguien. Pero surge entonces una terrible duda: ¿tendré cualidades?¿sabré cómo hacerlo?¿he nacido para ser emprendedor?
El debate acerca de si el emprendedor nace o se hace, parece haber llegado a una conclusión: la mayoría de expertos coincide en que hay mucho de características innatas pero también de aprendizaje.
Está claro que todos nacemos con cualidades emprendedoras. Curiosidad o inquietud, iniciativa, trabajo, adaptación, creatividad son aspectos que todos llevamos dentro en mayor o menor medida. El secreto reside en potenciarlos, en trabajar en ellos. Para que la receta funcione también hay que tener un poquito de suerte y valentía, muchísima motivación y por último, y no por ello ser lo menos importante, ponerle mucha pasión y perseverancia.
Decía Balzac “No existe gran talento sin gran voluntad”. Pues eso: si crees que el momento ha llegado, atrévete!! Emprendedores somos todos. Sólo hace falta quererlo.
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